DOGMAS Y OTRAS CONTRADICCIONES
Libro inédito
100 textos escritos desde la heterodoxia más radical y sin concesión alguna a lo políticamente correcto.
Editores interesados contactar en: hadafactory@yahoo.es
LA MASTURBACIÓN
La masturbación es el acto supremo, el más evolucionado, dentro de la vida sexual del hombre. Sólo en él se reconoce nuestra individualidad, porque a fin de cuentas somos una entidad que se está penetrando siempre a sí misma -toda penetración no deja de ser ficticia-. Así de solos, de encerrados en nosotros mismos nos hallamos, y aquí no habría que entender la soledad y el aherrojamiento como factores negativos.
Digo, entonces, que es acto supremo porque su aceptación supone el descorrimiento de los velos que ocultan el rostro de la verdad, de la unidad, de ahí que la Iglesia nos haya estado prohibiendo durante siglos el onanismo, por miedo a que el hombre descubra la verdad, en otras palabras, a Dios.
Y Dios significa, entonces, Poder para manejar el mundo; son preferibles los velos de la ignorancia que el ser conscientes de haber alcanzado la verdad. Despojemos, pues, la masturbación de todas sus connotaciones peyorativas, olvidemos las prohibiciones de antaño y no hagamos caso de las venideras. Contemplemos este acto en sí mismo, a la luz de la verdad, y al tiempo que otro salmón remonta el río porque sabe que su única certeza sobre la realidad se encuentra en el origen, veámonos en nuestra más absoluta individualidad, sin aditamentos ajenos a lo que constituye nuestra esencia.